Es posible que jugar a Space Invaders hoy en día no sea una experiencia tan intensa como lo fue en su momento. Es más, con todos los matamarcianos que han salido solo en Neo-Geo no necesitaríamos tomar más café en la vida. ¿Qué hacer entonces para que un clásico tan importante como la recreativa de Taito vuelva a estar de moda?, ¿rediseñar los gráficos en 3D?, ¿añadir música dubstep?, ¿incluir una historia profunda con giros insospechados? No os preocupéis porque Martin Raynsford ha dado con la solución ideal: llevar el juego al mundo real gracias a Arduino, una cámara web, unos sprites de papel y un cortador láser. A través de la pantalla del ordenador manejaremos el arma mortal como si fuera la nave del videojuego mientras convertimos en cenizas a todos los invasores que se mueven en la parte superior, haciendo realidad nuestro sueño infantil. ¿O acaso nadie se imaginó a sí mismo salvando la galaxia con su crucero de batalla disparando rayos por doquier? Es el problema de hacernos mayores, que al final adquirimos el conocimiento para hacer posible lo imposible aunque fuera mucho más glamuroso en nuestra imaginación.

Visto en | Engadget

Sobre El Autor

Cocreador y exredactor de la revista Fase Extra Magazine. Antiguo administrador del blog Fase Extra. Fotógrafo, editor de vídeo, cortometrajista y buscador pasivo de oro. Disfrutando de los videojuegos desde la época de Amstrad CPC hasta la de Xbox One, y vuelta atrás. Defensor de Alone in the Dark (2008) y otras causas perdidas. Una vez tuve tiempo libre.